INNOVADOR TRATAMIENTO PONE FIN A LAS OJERAS
- La pérdida de grasa en la piel bajos los ojos provoca la aparición de esta característica ojera que para muchos constituye un importante problema.
El tratamiento a través de la técnica denominada hialoestructura, se erige como un nuevo paso para la solución de las ojeras hundidas.
Uno de los problemas más comunes en la piel que rodea el ojo son las ojeras, que corresponden a la alteración de la coloración de esta zona, asi como a perdida o desplazamiento de pequeñas cantidades de grasa ,provocando un hundimiento de esa zona con la consiguiente aparición del también llamado Valle de lägrimas , lo que da una apariencia de cansancio, una mirada pesada e incluso algunos años de más.
La Dra. Carmen Moren, presidenta de la Sociedad Chilena de Estética Maxilofacial, explica que a contar de los 30 años, o bien por una condición genética, se va perdiendo compartimientos de grasa en la cara, siendo uno de los primeros en verse afectado el sector de la piel bajo los ojos. “Además se pierde tejido entonces toda esta estructura empieza a adelgazarse, perder tono y a oscurecerse”.
Si bien se puede lidiar con este problema mediante recetas caseras, productos especializados o simplemente un buen maquillaje, hay ocasiones en la situación requiere una solución mucho más drástica, con la técnica de de hialoestructura se obtienen excelentes resultados en el tratamiento estético de la mirada, con un elevado nivel de satisfacción de los pacientes.
Este tratamiento innovador y seguro es mediante el relleno con ácido hialurónico, que devuelve las características de los tejidos de esa zona. “Este sistema permite restituir el tono que el paciente tenía. Esto le devuelve la juventud y se va la sensación de fatiga. Ya no se ve el hueco de la ojera, que empieza desde el ángulo lagrimal, pero que puede ir incrementándose y llegar hasta la mitad de la mejilla debido a la pérdida de la hialuroestructura”, indica la Dra. Moren.
Este procedimiento, único y específico, es indoloro y rellena la piel bajo los ojos a través de una micro cánula, que no rompe vasos sanguíneos ni produce hematomas. “En 15 a 20 minutos está listo y te puedes incorporar a tu trabajo. Nadie se va a dar cuenta de que te hiciste algo. El resultado es de impacto absoluto e inmediato en una sola sesión”, agrega la facultativa.
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